lunes, 18 de agosto de 2025

ELEMENTOS CURRICULARES: RELACIÓN, EVALUACIÓN Y DISEÑO DE ACTIVIDADES

 

Actualmente, la normativa en Educación Infantil, Primaria y Secundaria supone conocer la relación entre los diferentes elementos curriculares y la trascendencia que tiene al programar la actuación en el aula y evaluar el desempeño del alumnado.

Aunque suponga un entramado complejo, a través de la siguiente entrada pretendemos simplificar el proceso considerando el criterio de evaluación que, al evaluarlo, nos va a permitir vincular de manera rigurosa el resto de los elementos curriculares hasta llegar al perfil de salida o perfil competencial.


Vídeo explicativo: La relación de elementos curriculares, el diseño de actividades y la evaluación

Todo esto nos lo permite la aplicación Séneca, siempre comprendiendo la citada relación curricular y el enfoque de la evaluación formativa y sumativa. Podemos remitirnos a la entrada "Reflexionamos sobre la evaluación" para entender el contexto en el que nos movemos y que el uso de aplicación sea efectivo.

En la siguiente imagen ofrecemos la relación de los elementos curriculares y cómo se van concretando hasta su aplicación en el aula, además de las diferentes rutas u opciones que nos permite Séneca para hacer que el proceso, con solo evaluar el criterio, nos lleve tanto a las calificaciones del área como al perfil competencial y resto de documentos e informes que genera Séneca


Infografía de diseño propio: Relación de elementos curriculares y recursos desde Séneca

Habría que hacer algunas consideraciones, aunque sería motivo de otra entrada:

  • Tener clara la diferencia entre evaluar y calificar (Séneca plantea “Actividades evaluables”, pero realmente se trata de “calificables”, ya que la evaluación va más allá)
  • La referencia para la evaluación son los criterios (no se evalúa la actividad en sí)
  • Instrumento de evaluación lo podemos identificar como actividad (cuando dicha actividad sirve para recoger evidencias de aprendizaje)
  • Para identificar el grado de adquisición del criterio necesitaríamos una herramienta (en nuestro caso diferenciamos instrumento de herramienta) y así vincular la evaluación cualitativa (información sobre dicho grado de adquisición) con la cuantitativa (calificando)
  • La evaluación tiene carácter continuo, es un proceso. Trimestre es solo una estructuración temporal del curso. La primera evaluación coincidiría con el primer trimestre, la segunda evaluación con el primer y segundo trimestre, la evaluación ordinaria (no existe tercera) iría desde inicio de curso hasta final. Muy importante para que el sistema recoja todo el proceso de calificación de los criterios de evaluación.
  • En cada área hay competencias específicas (puente con competencias clave y sus descriptores operativos); asociados a ellas, los criterios de evaluación establecidos por ciclos (referentes que indican nivel de desempeño en situaciones o actividades a las se refieren las competencias específicas). Para poder llevarlos al aula necesitamos los saberes básicos (conocimientos, destrezas y actitudes que constituyen los contenidos propios de cada área y cuyo aprendizaje es necesario para adquirir las competencias específicas)
Todo ello, junto con los documentos e informes que se generan, puede ser importante  para la decisión de promoción o no del alumnado, siempre basado en los criterios de promoción presentes en el proyecto educativo y basados en el grado de desarrollo de los descriptores operativos del perfil competencial o de salida).

Artículo 10, punto 6, de la Orden 30 de mayo de 2023
"Los criterios de promoción, recogidos en el Proyecto educativo, tendrán que ir referidos al grado de desarrollo de los descriptores operativos del Perfil competencial al finalizar cada ciclo, así como a la superación de las competencias específicas de las diferentes áreas."

Artículo 16, punto 1, de la Orden 30 de mayo de 2023
"...Para la toma de decisiones se tendrán en cuenta los criterios de promoción que deberán ir referidos al grado de desarrollo de los descriptores operativos del perfil competencial de cada ciclo establecidos en el Proyecto educativo del centro. Para ello se tendrán como referentes los criterios de evaluación, a través de los cuales se medirá el grado de consecución de las competencias específicas."

Actualmente hay diferentes enfoques o interpretaciones al identificar los conceptos de técnica, instrumento o herramienta de evaluación, mediante la siguiente imagen se ofrece una propuesta a partir de lo anteriormente expuesto.


Infografía de diseño propio: Procedimientos de evaluación 


Por tanto, veamos cómo se llega a la evaluación del área y al perfil competencial/de salida mediante un único proceso tomando como referencia el criterio


Infografía diseño propio: Explicación del proceso de evaluación del área y del perfil

Lo hacemos aquí con un ejemplo práctico a través de un criterio de matemáticas de 4º


Como vemos, el diseño de la actividad debe estar basado en criterio (o criterios), que son los que vamos a evaluar para identificar el nivel de desempeño. En este sentido, como indica Héctor Ruiz Martín, los conocimientos transferibles y significativos se desarrollan mediante su uso en múltiples contextos, y por medio de la reflexión desde múltiples perspectivas, lo que requiere de múltiples actividades de aprendizaje alrededor de las mismas ideas, modelos o procedimientos


Infografía de diseño propio: Procedimientos de evaluación 


El criterio o criterios de evaluación debe estar relacionado con la actividad y ponerlo en contexto a través de la tarea junto con otros aprendizajes. Una actividad sería, por ejemplo, la producción de un texto (el ejercicio las reglas de ortografía, clases de palabras...); la exposición oral, la resolución de problema o construcción con su razonamiento (el ejercicio las operaciones), la explicación del proceso de nutrición y su implicación (ejercicios serían identificar nombres, funciones...).

En la siguiente infografía también se indica cómo, a través de la calificación del criterio, llegamos a la calificación del área.

Infografía de diseño propio: De la evaluación a la calificación del área

lunes, 4 de agosto de 2025

REVÉS A UNA MANO O A DOS: UN (CURIOSO) PARALELISMO CON LA SOCIEDAD ACTUAL


¿Es posible unir en una reflexión un golpe de tenis, evolución de la sociedad actual y docencia? Lo vamos a intentar en las siguientes líneas, con las que solo se pretende plasmar y ordenar unas ideas que surgen a veces. Vamos a ello.

El revés a una mano en el tenis, con su elegante y fluida ejecución, es a menudo considerado un golpe de belleza clásica. Nos evoca una era pasada del deporte, una época en la que el estilo y la precisión se valoraban tanto como la potencia. Maestros como Roger Federer o Stan Wawrinka han demostrado que, en las manos de talentosos jugadores, es un golpe eficaz. Sin embargo, su complejidad técnica y el exigente punto de impacto lo han convertido en una rareza en el tenis moderno, dominado por el revés a dos manos. Atendiendo el ranking actual masculino, porque en el femenino es tendencia casi total de siempre (perfección en Justin Henin), son solo unos pocos jugadores de élite los que utilizan el revés a una mano: Musseti (rondando el top 10), el veterano Dimitrov (20º) o  Tsitsipas (en un mal momento actualmente) son ejemplo de ello.


Revés de Roger Federer

Recuerdo en mis inicios, a principios de los 80, cómo todos jugábamos con revés a una mano; incluso alguna escuela que iniciaba a dos, después cambiaba a una. Sin entrar en aspectos técnicos en la evolución de empuñaduras o posiciones del cuerpo, poco a poco ha ido predominando el revés a dos manos de los tenistas actuales. Eran la excepción jugadores como Borg o Connors, con ejecuciones diferentes a lo que es ahora el revés a dos manos, o posteriormente Agassi.

Este cambio en el tenis nos podría ofrecer un paralelismo fascinante, creo, con la sociedad actual. Las formas de hacer las cosas que antes se consideraban la norma ahora han sido superadas por nuevas metodologías, más directas y, en ocasiones, más eficaces ante los desafíos del presente (para un niño es más complicado aprender a una mano que  dos, por razones de fuerza o devolución de la bola). El revés a una mano es como una de esas habilidades o tradiciones que, aunque hermosas, se vuelven difíciles de mantener frente a la velocidad y la potencia de los cambios actuales.


Stan Wawrinka

Hoy en día, la vida se mueve a un ritmo diferente, a unos estímulos distintos y una evolución en continuo cambio. La cantidad de información que recibimos, la capacidad de analizarla, las exigencias del mercado laboral y la necesidad de adaptarnos a nuevas tecnologías, como la inteligencia artificial, son el equivalente a esa pelota que nos llega con una fuerza y un efecto imposibles de controlar con un revés a una mano. El revés a dos manos, en este contexto, representa la adaptabilidad y la búsqueda de la eficiencia. Su estabilidad y potencia nos ofrecen una mejor defensa o diseño de estrategias, contra los desafíos que se nos presentan de manera constante y a gran velocidad. Antes bastaba con reproducir un determinado contenido, ahora necesitamos razonar, comprender, analizar…servirnos de una memoria flexible y cognitiva, que se adapte a cualquier situación, evitando una memoria rígida sin comprensión.


¿Es mejor un revés que otro?, sinceramente y siguiendo el paralelismo, creo que no es cuestión de ver qué es mejor sin tener en cuenta el contexto, sino considerar qué es lo que demanda la situación y sociedad actual en cuanto a enseñanza y aprendizaje para que las personas sepan desenvolverse en ella. Como la citada necesidad de formar en el uso de dispositivos móviles, en redes sociales, en manejo de la información…etc. 

Igual que no podemos analizar, estructurar o diseñar el aprendizaje actual de un niño tomando como referencia la sociedad de tiempos de EGB o incluso de hace solo diez años, con el análisis del revés a una o dos manos sucedería lo mismo. Sería injusto un análisis y diseño del proceso enseñanza/aprendizaje fuera del contexto en el que se lleva a cabo.


Revés a dos manos de Carlos Alcaraz

Quizás condicionado por mis inicios, sí es verdad que considero más estético el revés a una mano, favorecedor de la volea o revés cortado; pero también he de reconocer las dificultades para el resto potente actual o un ataque con bola alta. La foto del revés a una mano quizás sea única, ese énfasis en la técnica y el timing perfecto, sigue siendo un recordatorio de la elegancia y la maestría del tenis de jugadores como Federer, igual que vendrán, si no están ya, referentes estéticos con el de dos. Como referentes hubo también en estilos musicales, escritores, pintores…etc. que dejaron su impronta y que después han sido sustituidos por otros, con diferentes tendencias ajustadas a tiempos actuales, y que también son modelos que seguir (en cuanto a aquellos valores que no debemos dejar de tener en cuenta relacionados con el esfuerzo, formación, superación, calidad técnica…etc; ya que no todo lo actual es modelo a seguir, como no todo lo anterior debía serlo)

En un mundo donde lo pragmático va de la mano del éxito, el revés a una mano es un símbolo de estilo que, aunque sea el más difícil, todavía tiene su lugar y, quizás, en algún momento volvamos a tener un ganador de Grand Slam con este golpe. Es una invitación a apreciar la complejidad y la belleza, aunque adaptándonos a los cambios necesarios.

¿Va a desaparecer el revés a una mano? Es cuestión de evolución, a veces hay finales felices y otros necesarios. Si lo protagonistas y profesionales del tenis optan por ello, es porque es necesario, sin más. 

Terminamos y no vamos a caer en el tópico de “cualquier tiempo pasado fue mejor”, El aprendizaje actual no se puede limitar a “nuestro propio aprendizaje” porque niños y niñas de ahora han nacido en otra época, con otras necesidades, otros contextos, otra sociedad a la que darle respuesta y construirla, otro partido diferente a jugar y con otros rivales distintos… pero eso ya es cuestión de otro artículo: ¿Todo tiempo pasado fue mejor?

Antonio Sánchez Barrera
Maestro y director del CEIP Huerta Retiro
Monitor nacional de tenis